Un cuerpo sano está en equilibrio.
Esto significa que, a diario, el organismo pone en marcha todos los recursos de que dispone para autorregularse y mantener una relativa constancia en la composición y propiedades del medio interno y de sus funciones, es decir para mantener la homeostasis.
No obstante, es normal que a lo largo de nuestra vida, vayan sucediendo situaciones que nuestro organismo las siente como «amenazantes», produciendo una serie de reacciones que se conocen como estrés. Frecuentemente estos acontecimientos generan unos cambios que exigen un sobreesfuerzo y obligando a nuestro organismo a salirse de su normalidad. El estrés puede responder a distintas situaciones: una intensa actividad física, una intensa actividad mental, factores ambientales, enfermedades, estados emocionales y otras.
La clave para superar el estrés está en la adaptación.
Durante el estrés, se ponen en marcha una gran cantidad de procesos neuroendocrinos para restaurar de nuevo el equilibrio y adaptarse al cambio, pero si la respuesta al estrés se vuelve demasiado intensa o duradera (crónica) los sistemas de regulación y los recursos utilizados se agotan y dan lugar a consecuencias negativas para la salud del individuo.
Si bien, un estrés puntual no es malo, llevado de un modo intenso y a largo plazo ya sí que supone un riesgo sobre todo cuando supera las capacidades de adaptación. Ejemplos de síntomas de un estrés ya cronificado: nerviosismo o ansiedad más acentuados que pueden derivar en depresión, problemas digestivos ya que altera la microbiota intestinal, problemas cardiovasculares, descenso de la libido, problemas hormonales, dermatológicos, inmunitarios…
¿Te suenan algunos de estos síntomas?
Y aquí es donde entran en juego los adaptógenos. Éstas plantas, son sustancias que podrían mejorar la resistencia del cuerpo a ciertas situaciones de estrés físico y emocional. Como su nombre indica, ayudan a que nuestro organismo se adapte mejor a los distintos factores o situaciones a los que nos exponemos todos los días y pueden alterar nuestra salud.
Para que una planta sea considerada un adaptógeno debe cumplir cuatro requisitos:
- Que sea inocua. No ser tóxica ni presentar efectos secundarios.
- Que tenga un efecto en la persona. Que aumente la resistencia de la persona a diferentes factores estresantes físicos, químicos o biológicos.
- Que actúe como un estabilizador. Al reforzar el sistema regulador de la homeostasis, mejoran la respuesta en ambos sentidos. Pueden calmar un sistema hiperactivo o reforzar un sistema alicaído.
Los 5 adaptógenos más conocidos por sus grandes propiedades.
ASHWAGANDHA
El rey de la medicina ayurveda, es un gran tónico adaptógeno y rejuvenecedor. Entre muchos de sus beneficios, destacan:
- Ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Ejemplo de estudio.
- Ayuda a controlar la glucemia. Después de varios estudios se ha comprobado que ayudar a reducir el azúcar la sangre.
- Tiene capacidad antiinflamatoria.
- Estimula la función respiratoria e inmunológica.
GINSENG
Aumenta la capacidad de adaptarse a condiciones físicas adversas y mejora el rendimiento físico y mental, ya que es un gran tónico para reducir la fatiga. Otras múltiples propiedades:
- Mejora la frecuencia cardíaca que se acelera como respuesta a un estresor en particular.
- Reduce la fatiga crónica. El estrógeno, la progesterona, el cortisol y la tiroides interactúan con neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y el GABA, los cuales se ven beneficiados con el consumo de ginseng.
MACA
Raíz proveniente de Los Andes (Perú) que ya en la antigüedad era usada como un gran vigorizante. Pese a sus grandes beneficios, es conocida principalmente por su potencial afrodisíaco y para aumentar el deseo sexual (tanto en hombres como mujeres), así como para disminuir la fatiga.
Otros efectos benéficos de la maca en la salud se han visto relacionados con los sistemas endocrino y reproductivo, ya que se puede utilizar para tratar la infertilidad y para mejorar el equilibrio hormonal.
HONGO REISHI
Es sin duda uno de los hongos más preciados. Conocido en la Medicina Tradicional China como “el elixir de la inmortalidad”. La propiedad más reconocida del reishi es que aumenta la eficacia de las células inmunitarias T en la lucha contra las células cancerígenas. Varios estudios muestran que mejora los resultados del tratamiento con quimio y radioterapia.
Además, este hongo es que es un gran regulador del sistema inmune, antiinflamatoria y antihistamínico.
RODHIOLA
Está considerada como un adaptógeno debido a su capacidad para estimular el sistema nervioso, disminuir la depresión, aumentar el rendimiento, mejorar el sueño y eliminar la fatiga.
Tiene un efecto muy positivo sobre el estrés, ya que ayuda a lograr un estado de relajación y a disminuir la ansiedad en periodos estresantes.
¡RECUERDA!
La mayoría de estos adaptógenos se pueden encontrar en polvo para agregar a nuestros alimentos o en cápsulas para que sean usadas como suplementación.
Las hierbas y plantas utilizadas como medicinas sí funcionan y deben ser utilizadas con precaución y sin abusar, porque, aunque sean naturales, en exceso podría llegar a causar toxicidad o dañar la salud.
Y es que natural, no siempre quiere decir inocuo.
Siempre es bueno consultar a un especialista cuando quieras utilizar un nuevo suplemento para ver que no está contraindicado con alguna patología o medicación que estés tomando.